Cómo decorar una casa de campo para sentirte siempre en vacaciones

Decorar una casa de campo no es solo colocar muebles bonitos, sino crear un espacio que te invite a relajarte, desconectar y, sobre todo, te haga sentir en plena naturaleza. Si no sabes por dónde empezar, aquí tienes algunos trucos que he usado yo misma (y que funcionan de maravilla en mi casa de campo, ¡doy fe!).

 

 La clave está en los materiales naturales

   Una casa de campo debe respirar naturaleza. Opta por materiales como la madera, la piedra o el barro para el suelo. Además, te recomiendo textiles naturales como los manteles de lino. Son perfectos para dar ese toque rústico sin renunciar a la elegancia. Mi favorito es un mantel beige que uso tanto en el comedor como en el jardín, una gran elección por ser un tono tan combinable.

 

                                                    

Muebles con historia, pero sin agobiar

   No hay nada como mezclar muebles antiguos con otros más modernos. A mí me gusta esa combinación, por ejemplo, en la cocina tengo una mesa de madera robusta que era de mi abuela, pero la he acompañado de sillas más ligeras para no sobrecargar el espacio. Para darle un toque especial, añado cojines suaves en tonos neutros y terrosos, como los cojines de lino que puedes encontrar en La Compañía Francesa. Son perfectos para dar calidez sin restar frescura.

                                                  

Textiles cálidos y envolventes

   En una casa de campo, no pueden faltar los plaids y mantas. Una manta de Baby Alpaca es ideal para esas noches más fresquitas. Yo tengo una en el salón que siempre acabo usando cuando me siento a leer un libro, ¡es tan suave que no puedo resistirme! Las mantas no solo decoran, también hacen que el espacio sea acogedor.

 

 Colores que conecten con el entorno

   A la hora de elegir colores, inspírate en la naturaleza. Los tonos tierra, beige y verdes suaves, como te he comentado, son perfectos. En mi salón, uso cojines de lino en tonos grises que combinan con las paredes de piedra, pero puedes añadir toques de color con jarrones de cerámica llenos de flores silvestres o preservadas. Son los pequeños detalles los que marcan la diferencia.

 

 

Elementos que hacen la vida más fácil

   Un esencial para las comidas en la casa de campo es una buena jarra de agua de cristal. Es una combinación elegante y práctica, que aportar un estilo campestre a la mesa. Y si estás pensando en una comida al aire libre, no dudes en usar un mantel resinado. ¡Es fácil de limpiar y tiene unos estampados preciosos!

 

Recuerda, decorar una casa de campo es más que estética, es crear un refugio que te conecte con lo esencial. Con estos pequeños detalles, tu casa será el lugar perfecto para escapar del estrés, y siempre con ese toque personal que tanto nos gusta. ¡A disfrutar del campo con estilo!

 

 


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